Mis padres me criaron en Huntington Park, California, que fue y es conocido como uno de los barrios más latinos de Los Ángeles y es parte del Este de Los Ángeles, pero que está cerca a South Central. Estas partes de L.A. son representadas en películas como de clase trabajadora, en su mayoría afro-americanas, y los residentes del norte y oeste de L.A. las ven como peligrosas.
Cuando tenía 13 años mi madre se embarazó de mi hermana y fue beneficiaria de WIC (Women Infants and Children, mujeres, bebés, e niños), un programa que también le dio acceso a clases de nutrición y amamanto, y que le daba cupones para leche, cereal, mantequilla de maní, y otros productos nutritivos. Mi hermanita nació y después resulta que la formula para bebés era cara, pero los cupones de WIC nos ayudaban con las cuentas. En la escuela algunos de mis amigos también hablaban sobre cómo ellos iban con sus padres a traer las cosas del WIC. Hablábamos sobre los cereales que teníamos. También muchos de nosotros eramos parte del programa de comida gratuita en la escuela, y algunos de mis amigos me habían comentado sobre cómo sus padres recibían estampillas de comida o welfare mientras trabajaban. Las cosas han cambiado al pasar los años.
La propuesta de presupuesto de Trump y su impacto
En marzo de 2017, Trump divulgó una propuesta de presupuesto que disminuirá el presupuesto para WIC. WIC es un programa que provee cupones de comida, educación de amamantamiento, y apoyo nutritivo para madres de bajos recursos, mujeres embarazadas, y niños menos de cinco años. Aunque el programa ha tenido varios problemas a través de los años, ha sido un blanco para eliminación desde 2012, cuando conservadores comenzaron a trabajar para erradicarlo.
La propuesta de Trump también quitaría $193 mil millones del Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP), mejor conocido en español como estampillas de comida. Los cambios tendrían una duración del 2018 a 2028. Además de hacerle daño a personas que necesitan este programa para pagar sus comestibles, los dueños de negocio se preocupan que una reducción de fondos de SNAP lastimaría a sus negocios ya que muchas familias de clase trabajadora tendrán menos dinero para pagar por sus provisiones.
Un informe estadístico de la Agencia del Censo dice que el 75% de madres que reciben estampillas de comida también reciben otros tipos de ayuda gubernamental que es importante para alimentar a sus hijos y familias. Muchos de los que critican a WIC, las estampillas de comida y otros beneficios alegan que estos beneficios desalientan a las personas a que trabajen. Sin embargo, un estudio del Departamento de Agricultura reveló que el 32% de beneficiarios de SNAP tenían aunque sea a una persona en la familia que trabajan a tiempo completo, y solamente el 6% de los beneficiarios de SNAP reciben otros beneficios. Un reporte del 2014 llamado “Hambre en América” descubrió que el 54% de hogares en sus programas de banco de alimentos tenían un trabajo por lo menos de un año. Para los que tenían por lo menos un año, el porcentaje era de 70%.
Además de disminuir los fondos para programs como WIC y SNAP, la propuesta de Trump incluye eliminación del la oficina de Vivienda y Desarrollo Urbano responsable para Meals on Wheels, un programa que lleva comida a las casas de mayores de edad. Aún así, el Congreso está considerando disminuir la elegibilidad de de algunas personas para sacarlos de SNAP. Han propuesto que la gente sea del 200% debajo del nivel de pobreza en vez del 130% actual.
Otro grupo que será afectado por la reducción de beneficios SNAP: licenciados universitarios. Hasta el 28% de personas que reciben estampillas de comidas tiene una educación universitaria. Algunos piensan que este es el caso por los sueldos estancados y la inflación. El Congreso todavía tiene tiempo para actuar y entrar esta propuesta en vigor o no, y esto tendrá un gran impacto en comunidades de clase obrera, inmigrantes, y mujeres e niños que dependen de estos programas importantes.